martes, 7 de abril de 2015

Tras subir su apoyo en las encuestas de opinión, Jobbik en Hungría quiere suavizar sus mensajes para atraer a los nuevos votantes

Partido Jobbik en Hungría está tratando de bajar el tono de su retórica radical y atraer a una base electoral más amplia, dijo su líder, después de un aumento de la popularidad que lo puso muy de cerca al partido Fidesz del primer ministro Viktor Orban.

Criticado por los grupos de derechos humanos por ser anti-romani, antisemita, pro-ruso y dar mensajes anti unión europea, Jobbik puede estar en camino de unirse a un gobierno en 2018. El partido está atenuando el lenguaje que le ayudó a convertirse en la segunda mayor formación en el Parlamento de Hungría después de una elección el año pasado, dijo el líder de Jobbik Gabor Vona, en una entrevista en el periódico Magyar Nemzet el fin de semana.

"Necesitamos preservar nuestro programa de una manera que haga un llamamiento a las capas más amplias de la sociedad húngara", dijo Vona, de 36 años, según la transcripción de la entrevista. "Yo voy a decepcionar a los que esperaban que Jobbik fuera un partido extremista, un partido nazi."

El apoyo a Jobbik se elevó hasta el 18 por ciento entre los votantes elegibles en febrero, desde el 11 por ciento en octubre, según una encuesta de Ipsos publicado el mes pasado. El apoyo a Fidesz se desplomó a un 21 por ciento desde el 35 por ciento en el periodo. Jobbik disfrutó de la más alta popularidad entre los votantes menores de 30 años y se alejó de los partidarios desilusionados de Fidesz, dijo Ipsos, el 17 de marzo.

Jobbik ha, en el pasado, organizado grupos paramilitares para acabar con lo que llamaron "el crimen de los gitanos." También quieren aflojar los lazos "euro-atlánticos" y construir relaciones más estrechas con países como Irán, Rusia y Turquía, quienes se resisten a las "políticas coloniales" de la UE, y comenzar las conversaciones sobre la reestructuración de la deuda de Hungría.

El partido también quiere contrarrestar la "búsqueda sionista de Israel para la dominación del mundo", según el sitio web del partido. Más de 500.000 húngaros, en su mayoría judíos, fueron asesinados en el Holocausto, según el Holocaust Memorial Center con sede en Budapest.


Vona ha castigado a algunos miembros de Jobbik por declaraciones inflamatorias. Este año, ordenó a un miembro del partido que había pedido el asesinato de los romaníes, también conocidos como gitanos, a vivir con un miembro del partido que es romaní durante tres días para que se arrepintiera. Otro miembro del partido Jobbik, que escupió en un memorial del Holocausto en Budapest se dijo que regresara con una flor al memorial para mostrar remordimiento.

"No hay lugar en Jobbik para las opiniones que son profanas, de carácter colectivo y que sean una deshonre" a las personas, dijo Vona en la entrevista. "Eso no quiere decir que no podamos hablar de la comunidad judía local, las políticas de Israel o el problema gitano".


Jobbik está en desacuerdo con los aliados de Hungría dentro de la OTAN, ya que ha apoyado a Rusia por su anexión de Crimea y un referéndum separatista disputado en el este de Ucrania. Hungría debería celebrar un debate interno sobre su pertenencia a la Organización del Tratado del Atlántico Norte y tratar de mantenerse neutral, especialmente en los conflictos con Rusia, dijo Vona. Poder salir de la UE sólo puede ser posible en el mediano plazo, dijo.

Bloomberg

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