viernes, 19 de abril de 2013

"Era una cuestión de tiempo" dice la policía danesa



Kim Thyssen fue uno de los dos policías que recibieron disparos en Vollsmose en agosto. Ha trabajado en el área residencial congestionada durante diez años, y como tal no está sorprendido de que se efectuaron disparos contra la policía. La zona es de hecho dominada por un núcleo duro de delincuentes que odian a la policía.

Kim Thyssen sabe lo que está hablando. Durante 15 años ha trabajado con la divulgación y el trabajo de prevención entre los niños y los jóvenes de origen étnico distinto del danés. Primero en un grupo especial y desde 2004 se ha basado en la policía comunitaria en Vollsmose, con Bøgeparken como su principal área Kim Thyssen no se hace ilusiones y no tiene prejuicios, porque conoce la realidad.

¿Por qué no está particularmente sorprendido, decepcionado o sorprendido por haber recibido un disparo en la noche del 14 Agosto, cuando los ánimos se desbordaron en Clearwater Beach en Vollsmose?

- Muchos de los residentes con problemas pequeños en el este de Portland son bombas de tiempo, así que era sólo cuestión de tiempo, y hasta que apareció el primer muerto, dijo el asistente policial.

Kim Thyssen ya ha experimentado, ataques, donde le han sido arrojado piedras y botellas contra él, pero nunca ha sido alcanzado.

- Pero el descontento ha estado hirviendo a fuego lento entre los jóvenes en los últimos dos o tres meses. Por ejemplo, hace poco habían destrozado la ventana trasera del coche patrulla. En general, han estado molestos con la policía y han estado esperando una oportunidad. En este momento hay un grupo muy difícil en Clearwater Beach, y se está moviendo en la dirección equivocada, Kim Thyssen, también puede indicar que la población local tiene un tiempo difícil en Bøgeparken, y algunos simplemente han decidido no trabajar entre los amotinados por su propia seguridad.

Kim Thyssen dice además que Bøgeparken principalmente está habitada por árabes, y que se trata de un grupo de palestinos apátridas que establece el orden del día de la delincuencia en la zona. Muchos de ellos, como la policía local dice tienen tambiénuna limitada inteligencia. El área de los psicólogos de la escuela incluso han caracterizado algunos de los jóvenes como la “etapa lenta”, como se le llama en la jerga.

Ellos simplemente no tienen las herramientas necesarias para discutirlo. Muchos de ellos también tienen una afición extrema por el fuego. Durante el verano se registraron más de 100 puntos detrás de Bøgeparken, dice Kim Thyssen.

Racismo a la inversa.

El oficial de policía con experiencia también dice que en Bøgeparken les llaman "Putos Policías" los niños de entre 8-10 años de edad. Ellos son los que gritan “policía de mierda” y epítetos similares a la policía. Luego están sus hermanos mayores, que cuando hay un policía le lanzan piedras y botellas, y es cuando realmente se pone difícil, en realidad son a veces sus padres de 30-35 años, quienes incitan a los jóvenes a pasar al ataque contra la policía. El grupo complicado de los palestinos apatriados en Bøgeparken cuenta con cerca de 40 personas, evalúa Kim Thyssen, pero rápidamente se puede convocar a la gente y de repente son más de 100 jóvenes y viejos problematicos reunidos.

- Siguen un odio intolerable a la autoridad. Además, algunos tienen el racismo inverso aquí, y se ha vuelto más pronunciado en los últimos años. Los daneses lo tienen muy difícil en Bøgeparken. Sus niños no pueden jugar en el arenero para niños.

No hay amigos

Ahora, uno podría llegar a pensar que el disparo ha despertado la ira o la decepción en Kim Thyssen. Los residentes de Bøgeparken lo conocen y él los conoce y tenían relaciones pacíficas, sin embargo, recibió un disparo él y su colega.

- Hay tres cosas para ser un buen policía en Vollsmose. Usted debe ser lúcido, de buen corazón y frío en el culo. Esto significa que los residentes de aquí vienen algo más cercano a uno, y que a menudole tienen ”rodeado” por 30-40 curiosos. Sólo hay que recordar siempre que tenemos a alguien que conocemos, pero no tenemos ningún amigo. A menudo nos llaman racistas, pero así es como se ven en todos los que hacen cumplir la ley, dice sobriamente de Kim Thyssen.

- Pero sigo en mi trabajo, y el tiroteo no me impide hacerlo, dijo.

Información completa en: Dansk Politi

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